Bermejo, José Carlos: Estoy en duelo. PPC (en colaboración con el Centro de Humanización de la Salud), Madrid, 2005. Colección Pastoral 15. 142 páginas. Comentario realizado por Javier Sánchez Villegas.
Ya hace algún tiempo, allá por octubre de 2012, comentaba en el blog un libro de Dolores Aleixandre (ver aquí) en el que expresaba el dolor que se siente cuando ves que una persona querida va perdiendo sus facultades físicas o psíquicas. De hecho, el libro de Dolores me ayudó a gestionar todo ese sinfín de emociones que iban surgiendo sin control, hasta el punto de poder vivirlas e integrarlas equilibradamente (¡gracias, Dolores!). Sin embargo, nada comparable con la muerte de un ser querido. Por mucho que puedas pensar que tarde o temprano va a ocurrir, cuando llega el momento te pilla siempre "con el pie cambiado", máxime si la muerte llega rápidamente, sin avisar, y la persona querida se encontraba bien. En fin...
Sé que el tema se las trae, que normalmente no hablamos de él, que hacemos lo posible y casi lo imposible por evitarlo, pero hoy es lo que toca. Y lo hago de la mano de un libro que estaba encima de una mesa en la sala del tanatorio que nos han asignado (supongo que en todas las salas habrá uno): Estoy en duelo, de José Carlos Bermejo. Si bien al principio no le hice mucho caso (uno no está para leer ni para escribir), al cabo de unos días me lo he leído de un tirón. Y me ha encantado. Por eso me atrevo a recomendarlo en Libris Liberi.