Daelemans, Bert: La vulnerabilidad en el arte. Un recorrido espiritual. PPC, Madrid, 2021. 151 páginas. Comentario realizado por Ianire Angulo Ordorika.
Bert Daelemans nos tiene acostumbrados a libros que requieren ser leídos a sorbos, porque tienen un fuerte elemento de contemplación y de implicación personal. Es lo que sucede con esta obra, que nos acerca a la vulnerabilidad de puntillas, con la reverencia y el respeto que merece, y lo hace a través de variadas expresiones artísticas en las que el autor descubre cómo se difumina la diferencia entre lo sagrado y lo profano. Desde el prólogo del libro, Daelemans deja clara la diferencia que descubre entre fragilidad y vulnerabilidad. Si bien todo ser humano es esencialmente frágil, él entiende la vulnerabilidad como un modo concreto de vivir esa fragilidad, eligiéndola y orientándola hacia otra persona. Lo que puede parecer debilidad, se convierte así en posibilidad de encuentro, de vínculos y de relación.
De este modo, la debilidad no es motivo de pesimismo, pues nos abre a la esperanza y nos invita a tejer vínculos con otros y con Otro. De hecho, esta es la dinámica asumida por el Dios cristiano al encarnarse y hacer suya la condición humana, con toda la fragilidad que eso implica. Desde esta perspectiva, Daelemans nos adentra en cuadros, esculturas, danzas y las más variadas expresiones artísticas que, reflejando con belleza lo frágil, nos abren a la