Francisco Ramírez Fueyo: El evangelio según san Ignacio. Por Junkal Guevara Llaguno

Ramírez Fueyo, Francisco: El evangelio según san Ignacio. La vida de Cristo en los Ejercicios Espirituales y la tradición bíblica en la Vita Christi del Cartujano. Mensajero-Sal Terrae-UPCo, Bilbao–Santander-Madrid, 2020. 712 páginas. Comentario realizado por Junkal Guevara Llaguno.

Quien conoce los Ejercicios recordará que el llamamiento del rey temporal [Ej 91], un rey temporal, liberal y humano, se presentan para compararlo con el que hace Cristo Nuestro Señor ante el cual, los que tuvieran “juicio y razón”, ofrecerían todas sus personas al trabajo [Ej 96]. Y es esto precisamente lo que encontramos en esta obra del profesor Ramírez Fueyo: un académico con formación en Filología Hispánica, biblista, teólogo y jesuita que ha dispuesto todas estas facetas de su formación y compromiso eclesial, con juicio y razón, para brindarnos un trabajo de altura académica que le honra y honra la investigación académica y a la institución donde la desempeña. 

Así, desde la Introducción se hace notar que el estudio de la serie final de los «Misterios de la vida de Cristo» de la vida pública [Ej 261- 312], se hace situándolos, en primer lugar, en el contexto histórico de las tradiciones literarias y bíblicas de la época en que se gestaron, los últimos años del s. XV cuando España participó de una renovación espiritual favorecida por la capacidad lectora y la imprenta (p. 21). 

Con esta hoja de ruta, el trabajo –de 648 páginas– se organiza en dos grandes partes. La primera, “las fuentes literarias y tradiciones espirituales de los misterios del libro de los Ejercicios”, se desarrolla en ocho capítulos pensados para el “lector más especializado” (p. 16). El autor se adentra en el contexto histórico, las fuentes literarias (las Vitae Christi; los textos bíblicos romanceados; Biblias moralizadas; leccionarios…); en el influjo del Cartujano; en el origen del texto de los misterios (si transcripción directa del latín; si traducción propia; si influencias…) y el momento en que fueron incorporados al texto de los Ejercicios; en los presupuestos teológicos y espirituales de los misterios (con un capítulo para comparar el Cristo de Ignacio y el del Cartujano); y, por último, en otra serie de estudios comparativos entre estas dos obras: la lectura orante, las oraciones vocales… Un trabajo de altura científica (cfr. pp. 49-61 sobre Postillas, o Epístolas o Evangelios) donde resulta particularmente interesante el estudio de todas las fuentes que ayudan a comprender todavía mejor a san Ignacio y la obra de los Ejercicios, y donde encontramos una aportación singular del autor sobre el método de la contemplación en los Ejercicios (C. 7.f) que deberíamos leer ejercitantes y directores para recuperar algunos elementos muy genuinos de la propuesta “bíblica” ignaciana que quizás estamos devaluando un poco. 

La segunda parte, particularmente recomendada a ejercitantes, estudia pormenorizadamente la selección y orden de 16 misterios de la serie final [Ej 261-289], misterios de la vida pública que concentran la mirada de Ignacio “en los rasgos que más le atrajeron a él en su proceso de conversión y seguimiento” (p. 363). El análisis del conjunto va precedido de una introducción que permite reconocer una suerte de “cristología ignaciana”. Cada misterio se estudia partiendo del texto final de los Ejercicios, que se coteja con las que pudieron ser sus fuentes y con los relatos bíblicos. Aunque el autor incluye algunas sustanciosas citas, en esta segunda parte hay una síntesis muy propia y concentrada del profesor Ramírez Fueyo que, pudiendo ser de provecho para el ejercitante y “quien ha de dar a otro materia y forma”, no se pierde en tecnicismos. 

El volumen incluye varios apéndices. El primero, bellísimo, con ilustraciones de los manuscritos de Vita Christi; Evangelios y Epístolas; libros de horas que el autor ha buscado por bibliotecas de todo el mundo. Además, un elenco de bibliografía citada; índices de nombres, conceptos, lugares ignacianos, referencias bíblicas y del texto ignaciano y, por último, una tabla de ilustraciones. 

En conjunto, una aportación a la colección Manresa que la enriquece en un punto últimamente menos estudiado, el trasfondo literario-bíblico de la propuesta de Ignacio. Además, un texto versátil porque interesa a muchos (especialistas, curiosos, directores y ejercitantes). Por último, un ejercicio académico a la altura del momento en la que el autor ha empeñado toda su valía, también la que tiene que ver con su destreza en el manejo de los recursos tecnológicos, en el conocimiento de los subsidios tecnológicos y de las fuentes de los repositorios digitales que no pueden faltar hoy en cualquier investigación académica que se precie.

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