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viernes, 14 de octubre de 2022

Giovanna Rivero: Tierra fresca de su tumba. Por Jorge Sanz Barajas

Rivero, Giovanna: Tierra fresca de su tumba. Candaya, Barcelona, 2021, 170 páginas. Comentario realizado por Jorge Sanz Barajas (colaborador del Centro Pignatelli, Área de Cultura. Correo: jsanzbarajas@gmail.com).

Relatos de Giovanna Rivero: cuerpo a tierra

La literatura boliviana nos queda siempre a desmano. Es como si el país, a fuerza de estar rodeado de gigantes, se nos quedara chico. Sin embargo, la dimensión de su narrativa última es descomunal: tomen nota de los nombres que hay que seguir: Rodrigo Hasbún, Edmundo Paz Soldán, Liliana Collanzi, Magela Baudoin, Wilmer Urrelo y, sin duda, Giovanna Rivero, un talento literario extraordinario.

Hay escritores que tienen la capacidad de la presciencia y, además, saben narrarla. Verne, Don Delillo, Philip K. Dick o Kafka han sido capaces de ver la que se avecinaba y alegorizar los grandes problemas en episodios en apariencia triviales. El checo Kafka evidenció que el pobre Gregor Samsa, insecto, no era sino uno de nosotros: una minúscula pieza en el engranaje de la cosificación productiva, un elemento que ha perdido la condición humana y es, por tanto, exterminable. Philip K. Dick anticipó la transhumanidad en Sueñan los androides con ovejas eléctricas (adaptada al cine como Blade Runner, de Ridley Scott), Don Delillo preludió en Submundo (1997) el atentado contra las Torres Gemelas antes que nadie, y con él, la nueva era de la barbarie. Los relatos de Tierra fresca de su tumba, último libro de

lunes, 27 de junio de 2022

Ta-Nehisi Coates: El baile del agua. Por Jorge Sanz Barajas

Coates, Ta-Nehisi: El baile del agua. Seix Barral, Barcelona, 2022. 522 págs. Traducción de Javier Calvo. Comentario realizado por Jorge Sanz Barajas (colaborador del Centro Pignatelli, área de Cultura, jsanzbarajas@gmail.com).

El legado afroamericano a la nación

Quizá no le suene el nombre de Ta-Nehisi Coates, pero seguro que ha oído hablar de la serie Marvel Comics. El autor de El baile del agua es, junto al dibujante Brian Stelfreeze, el guionista de Capitán América o Pantera Negra desde 2016, protagonizado por T’Challa, el primer superhéroe negro de los comics norteamericanos. 

El libro que reseñamos, El baile del agua, ha revolucionado el mercado literario estadounidense: número uno en ventas del New York Times y elección personal de la mediática Oprah Winfrey es una relevante tarjeta de presentación. Es evidente que estos datos, por sí solos, no avalan sino un producto de interés, sin embargo, en este caso nos hallamos ante una excelente novela que viene a sumarse a la corriente de literatura enfrentada al supremacismo blanco y a los nacionalismos identitarios, movimiento que eclosionó con la llegada de Trump al poder y que está revisando de manera exhaustiva la aportación de las mal llamadas “minorías” a la nación americana.

miércoles, 11 de mayo de 2022

Jorge de Cascante (ed.): El libro de Gloria Fuertes. Por Jorge Sanz Barajas

Cascante, Jorge de (ed.): El libro de Gloria Fuertes. Antología de poemas y vida. Blackie Books, Barcelona, 2021. Edición y textos de Jorge de Cascante. 448 páginas. Comentario realizado por Jorge Sanz Barajas (Colaborador del Centro Pignatelli Área de Cultura, Zaragoza. E-mail: jsanzbarajas@gmail.com).

Desencadenando verdades: Anto(bio)logía de Gloria Fuertes

Gloria Fuertes cuenta que siempre fue una niña rara y la prueba es que nació a los dos días de edad, hija de un parto laborioso, que su madre la dejó demasiado temprano y tuvo que valerse por si misma. Dice que espabiló gracias a su ortografía y su buena o mala leche: un día escribió en el encerado del colegio de monjas que “los niños no vienen de París, sino de parir” y la echaron del aula. Para entonces ya había aprendido que las notas se ponen al revés, que los ceros son lo mejor y que sacar tres ceros es el colmo de la inteligencia. Fue criada, contable, taquígrafa, contadora de huevos, bibliotecaria, redactora de tebeos infantiles. Cuentan que su ortografía era singular y propia, que los correctores editoriales la daban por imposible porque los acentos nunca estaban en su sitio y las consonantes se empeñaban en cambiar de forma y hasta de sitio. Cuentan que quiso ir a la guerra para pararla, así que muy cuerda no debía estar. Ella insistía en que le costaba muchísimo trabajo parecer tan tonta y escribir tan mal, pero uno aprendió a tropezar en sus disparates porque era la mejor manera de caer de pie. Por eso, y para seguir cayendo de pie, agradezco tanto a Jorge de Cascante haber editado esta maravilla.

miércoles, 10 de noviembre de 2021

Antonio Scurati: M. Por Jorge Sanz Barajas

Scurati, Antonio: M. El hombre de la providencia. Alfaguara, 2021, 587 páginas. Traducción de Carlos Gumpert. Comentario realizado por Jorge Sanz Barajas (Colaborador del Centro Pignatelli, Área de Cultura, Zaragoza. E-mail: jsanzbarajas@gmail.com).

Luces sobre las sombras de Mussolini

El escritor italiano Antonio Scurati entrega el segundo volumen de la monumental ficción documental que inició en 2019 con M. El hijo del siglo, novela de más de 800 páginas que fue galardonada con el premio Strega. Si en la primera entrega analizaba en profundidad los orígenes del acceso de Mussolini al poder hasta el asesinato del líder socialista Giacomo Matteotti en junio de 1924, en esta ocasión se ocupa del periodo comprendido entre 1925 y 1932, desde que M. sufre la úlcera gastroduodenal hasta la traumática ruptura con su amante Margherita Sarfatti y el simbólico desfile de tullidos de la gran guerra que inaugura la Via dell’Impero (hoy Via dei Fori Imperiali). Lo que en un principio estaba previsto que fuera trilogía, acabará siendo tetralogía a juzgar por las palabras de Scurati, que entiende necesario un último volumen donde ocuparse de la caída del Duce.

La primera virtud que se adivina en este libro es la pasión que genera su lectura. Es adictivo a pesar de su volumen. Ya lo era el primero, a pesar de tener doscientas páginas más. El secreto estriba en una prosa ágil y ordenada, desapasionada y directa; también en una estructura en ocho partes a modo de anuario, donde

viernes, 29 de octubre de 2021

Donal Ryan: Un año en la vida de Johnsey Cunliffe. Por Jorge Sanz Barajas

Ryan, Donal: Un año en la vida de Johnsey Cunliffe. Ed. Sajalin, Barcelona, 2020. 234 páginas. Traducción de Celia Filipetto. Comentario realizado por Jorge Sanz Barajas.

Donal Ryan es uno de los más brillantes escritores irlandeses de la actualidad. Hay quien lo empareja ya con John McGahern, quizá el mejor narrador, junto a Colm Tóibín y John Banville, de la Irlanda de fin de siglo. En sus novelas, fraguadas en el realismo, refleja como nadie la crisis del nuevo milenio en esa sociedad irlandesa cuya secularización avanza paralela a su salida de la crisis. Las razones de este fenómeno tienen su raíz en la utilización de la religión como coartada por los poderes económicos que esquilmaron al conocido como “tigre celta” desde los noventa. Bien valdrá Ryan para comprender qué sucedió en estas dos décadas (1990-2008) y bien habrá que saber qué aconteció en la vieja Irlanda para comprender las excelentes novelas de Donal Ryan, una de las cuales, Un año en la vida de Johnsey Cunliffe, reseñamos hoy. 

En esa última década del siglo pasado, la fervorosa y tradicional economía rural irlandesa se convirtió en una plataforma postindustrial preparadísima, con un impuesto de sociedades tan bajo que atrajo fondos de inversión poco éticos y, con ellos, las multinacionales que los alimentaban. En quince años, la renta per cápita irlandesa se multiplicó por 1,5, pero el precio de la vivienda subió un 250%. Toda la economía se volcó hacia el boom inmobiliario, con créditos baratos y

lunes, 31 de mayo de 2021

Miyazawa Kenji: La constelación de los cuervos y otros cuentos mágicos. Por Jorge Sanz Barajas

Kenji, Miyazawa: La constelación de los cuervos y otros cuentos mágicos. Satori Ediciones, Gijón, 2018. 155 páginas. Traducción y prólogo de Kuniko Ikeda y Marta Añorbe Mateos. Comentario realizado por Jorge Sanz Barajas (Colaborador del Centro Pignatelli Área de Cultura; e-mail: jsanzbarajas@gmail.com).

Leer a Miyazawa Kenji con ojos de niño

Uno siempre echa en falta poder leer desde el asombro, quitarse los ropajes de la importancia, sentirse zarandeado por el sinsentido y creer que las palabras tienen una magia escondida y trascendental. Uno siempre añora tener ganas de llorar cuando estalla una pompa de jabón o pasar una tarde encontrando rostros en las nubes volanderas. Descubrir a Miyazawa Kenji es como recordar el primer bombón o el sabor acre del primer beso: el sentido original del cuento no puede ser otro que abrir la mente a la maravilla.

Como el nonsense de Edward Lear, los cuentos de Kenji se abren paso por la vereda del encantamiento. Los relatos crecen adoptando la forma de fábulas, pero asumiendo las condiciones que el género impone: bajo la aparente simplicidad de la fábula se oculta siempre un resorte moral que engatilla una enseñanza; por eso, las personificaciones de animales, plantas u objetos conciernen al ser humano como compañero de la Creación y no como dueño de ella. Las valiosas enseñanzas de Kenji (1896-1933), instructor en la escuela agrícola Hanamaki, invitan a la contemplación de esa inefable frontera entre las nubes y la nieve en

viernes, 14 de mayo de 2021

Kurt Vonnegut: Matadero Cinco. Por Jorge Sanz Barajas

Vonnegut, Kurt: Matadero Cinco. La cruzada de los niños. Blackie Books, Barcelona, 2021. 205 páginas. Traducción de Miguel Temprano García. Comentario realizado por Jorge Sanz Barajas (Colaborador del Centro Pignatelli Área de Cultura, Zaragoza. E-mail: jsanzbarajas@gmail.com).

Kurt Vonnegut y la indecente épica de la guerra

Necesitamos más que nunca a Kurt Vonnegut. Y siempre lo tendremos. A eso nos agarramos sus fieles. No será fácil: vuelven tiempos feroces en los que pensar y hablar estorba e indigesta al poder. Matadero Cinco es un alegato contra la guerra, pero sobre todo contra la épica de la guerra. Vonnegut sabía de qué hablaba: su madre se suicidó el día de la madre de 1944, a pocas horas de que Kurt iniciara su viaje como soldado al frente belga. Veterano de guerra, fue capturado por los nazis en la batalla de las Ardenas el 19 de diciembre de 1944 al quedar rezagado del batallón 106 de infantería tras las líneas enemigas, vagando solitario junto a “Wild Bob” William Joseph Cody Garlow (nieto de Buffalo Bill), en un espeso bosque belga. Trasladado a Dresde, vivió el tristemente célebre bombardeo del 13 de febrero de 1945, que arrasó por completo la ciudad y ocasionó más de 100.000 víctimas civiles.

Cuando estalló la tragedia, estaba trabajando junto a sus compañeros en una fábrica de jarabe de malta y pudo refugiarse en la cámara frigorífica, en el sótano de un antiguo matadero. Al salir, la ciudad había desaparecido y hasta los pájaros

lunes, 5 de abril de 2021

Joyce Carol Oates: Un libro de mártires americanos. Por Jorge Sanz Barajas

Joyce Carol Oates: Un libro de mártires americanos. Alfaguara, Madrid, 2017. 814 páginas. Traducción de José Luis López Muñoz. Comentario realizado por Jorge Sanz Barajas.

La novela de la gran paradoja americana

Joyce Carol Oates, la eterna candidata al Nobel que quizá no alcanzará jamás, la escritora capaz de escrutar como nadie la anatomía patológica de América, acaba de escribir quizá su mejor novela hasta hoy: Un libro de mártires americanos. Se trata de una autora prolífica –más de cien títulos ya–, pero la envergadura de sus novelas dificulta su difusión. Con todo, estamos ante una de las grandes novelistas americanas: a la altura sin duda de Capote –que la odiaba–, de Updike, Roth, Delillo o Pinchon. De Joyce Carol Oates nos atrae que no se esconde ante los retos morales, pero sobre todo que es capaz de situarnos en todas las psicologías del complejo arco político norteamericano. Juega siempre con extrema habilidad, escondiendo sus armas hasta dejarnos en la orilla de la contradicción, allí donde nuestros principios son más endebles. Sus novelas, con todo, son mastodónticas: les sobra quizá un centenar de páginas, pero el oficio con que sostiene la tensión es suficiente para que el lector no repare en una cierta sensación de apagón imaginativo.

Decíamos que Oates no rehúye los retos morales: años atrás nos había relatado las

miércoles, 3 de marzo de 2021

Elif Shafak: Las tres pasiones. Por Jorge Sanz Barajas

Shafak, Elif: Las tres pasiones. Lumen, Buenos Aires, 2016. 497 páginas. Comentario realizado por Jorge Sanz Barajas (Profesor de Literatura Española, Colegio “El Salvador”, Zaragoza. E-mail: jsanzbarajas@gmail.com).

Elif Shafak: mundo o tribu

Elif Shafak es probablemente la escritora más influyente de Turquía, un país donde son necesarias las voces que hablen desde la libertad. Su prestigio, ganado a pulso tras una decena de excelentes novelas y media docena de lúcidos ensayos, la protege en cierta medida. Representa a la vez todos los logros de la revolución y también todos sus fracasos porque en ella están la libertad y la perplejidad, el pluralismo y la tradición. Hablaremos en esta ocasión de su novela Las tres pasiones, un relato metafórico sobre la manera de encontrar una idea de Dios de la que puedan hablar creyentes y ateos.

Shafak plantea desde hace tiempo los riesgos que conlleva la espectacularización del debate. Encontramos en las redes y en los medios, desde hace unos años, falsas discusiones entre personas con ideas muy polarizadas, que discuten sin posibilidad alguna de llegar a territorios comunes, a espacios de encuentro. Las entrevistas están planteadas desde el principio para que no haya puntos en común, solo interesa en ellas la tensión y la disputa, la descalificación y el distanciamiento.

lunes, 18 de enero de 2021

Rosa Ribas: Pensión Leonardo. Por Jorge Sanz Barajas

Ribas, Rosa: Pensión Leonardo. Siruela, Madrid, 2015. 350 páginas. Comentario realizado por Jorge Sanz Barajas (Profesor de Literatura Española, Colegio “El Salvador”, de Zaragoza. Correo electrónico: jsanz@jesuitaszaragoza.es).

Hurgar en el silencio

Rosa Ribas es una escritora consagrada, aunque algunos lectores oigan su nombre por primera vez en estas líneas. Ausente de los cenáculos y las tertulias literarias, las presentaciones de libros, los jurados y los premios por el simple hecho de vivir en Fráncfort junto a su marido desde hace veinticinco años, su nombre es de sobra conocido por los amantes de la buena literatura, aunque no tanto por esas grandes superficies que solo instalan en sus anaqueles a esos autores que consideran que sus lectores son profundos ignorantes, que hay que contárselo todo, y llevarlos de la manita hasta el final y exigirles el mínimo esfuerzo como lector. No quisiera con estas palabras tirar piedras en el tejado de Rosa Ribas, porque es una de esas escritoras en las que se aúna calidad literaria y atracción fatal: todavía estoy por encontrar a uno de los (¿más de un centenar de…?) lectores a quienes he recomendado encarecidamente esta novela y no me hayan devuelto un reporte favorable o elogioso.

miércoles, 27 de mayo de 2020

Olivia Manning: La gran fortuna. Por Jorge Sanz Barajas

Manning, Olivia: La gran fortuna. Libros del Asteroide, Madrid, 2020. 448 páginas. Traducción de Eduardo Jordá. Comentario realizado por Jorge Sanz Barajas (Colaborador del Centro Pignatelli, Área de Cultura. E-mail: jsanzbarajas@gmail.com).

Olivia Manning, una extraña en Bucarest, 1939

Si usted quiere leer una buena novela sobre la Segunda Guerra Mundial, seguramente se inclinará por autores consagrados como Eric Vuillard, Irène Némirovsky, Primo Levi, Stefan Zweig, Joseph Joffo, Curzio Malaparte o Vasili Grossman. Déjeme decirle algo: leer a Olivia Manning es una experiencia que no debe perderse. Es quizá la mejor escritora inglesa de su generación, apenas conocida en nuestro país porque no contamos más que con un par de viejas traducciones, hasta que Eduardo Jordá ha emprendido la excelente tarea de traducirla para Libros del Asteroide.

Olivia Manning es una escritora extraordinaria, meticulosa y mordaz como pocas, que lleva años sin que nadie le ponga el dedo encima de sus libros. Inexplicable, porque es sencillamente extraordinaria. Su Trilogía Balcánica, compuesta por La gran fortuna, The Spoilt City y Friends and Heroes son, junto a la Trilogía del Levante, el gran fresco de la guerra mundial en el sur de Europa y el Medio Oriente. En 1987, la BBC rodó una serie de gran éxito protagonizada por Emma Thompson y Kenneth Branagh. Y, sin embargo, el mercado editorial español no le ha prestado la

lunes, 2 de marzo de 2020

Miguel Carcasona: Hannibaal. Por Jorge Sanz Barajas

Carcasona, Miguel: Hannibaal. Pregunta Ediciones, Zaragoza, 2019. 223 páginas. Comentario realizado por Jorge Sanz Barajas.

La novela histórica corre el riesgo de convertirse en una mera escenografía episódica. El lector se conforma con ambientaciones más o menos fiables que le permitan entender de manera sencilla algo tan complejo como la historia. Eso está bien, siempre y cuando uno no crea que conoce la historia porque ha leído novelas. Simplificar es interesante si lo que se pretende es divulgar, pero para construir identidades compartidas es necesario algo más que un buen guion. Es cierto que novelistas e historiadores han vivido siempre en una edificante tensión creativa: Manuel Tuñón de Lara solía decir que para entender el siglo XIX, lo mejor era leer a Galdós, mientras que para comprender el XX, lo mejor era acercarse a Max Aub. Los buenos novelistas no prescinden de la tarea más interesante: la documentación.

Hay más de uno que (omitiré los nombres, por decoro) contrata esa faena y luego sale lo que sale… Hay también quien cree que podría contar la historia mejor que los historiadores: sin comentarios. Sin embargo, nadie pondría en tela de juicio que la simbiosis entre unos y otros da lugar a artefactos más que interesantes.

miércoles, 5 de febrero de 2020

Irène Némirovsky: Suite francesa. Por Jorge Sanz Barajas

Némirovsky, Irène: Suite francesa. Salamandra, Madrid, 2005. 480 páginas. Traducción de José Antonio Soriano Marco. Comentario realizado por Jorge Sanz Barajas.

¿Qué decir de un libro que permanece escondido en una maleta durante seis décadas, que no ha perdido un ápice de actualidad y que día a día gana lectores? Suite francesa, de Irène Némirovsky, fue escrito antes de 1941, sólo sus hijas supieron de él hasta 2004 y su prestigio no ha dejado de crecer en un goteo incesante de ediciones que corre paralelo al «boca a boca» con que los lectores lo recomiendan.

El libro narra un asunto espinoso: la vergonzante huida de los franceses durante la ocupación alemana en 1940. La mirada procede de una rusa expatriada, de condición judía, convertida al cristianismo, que ha tomado la firme decisión de no huir más y contempla perpleja los turbios reflejos de la condición humana. Suite francesa es un libro apasionante, pero la historia de su transmisión no desmerece. Se trata de un material en carne viva, escrito sin tiempo alguno para digerir las emociones directas que su autora estaba experimentando; el libro es impactante y físico. Irène Némirovsky lo cuajó sin apenas medios: escrito con letra minúscula por el miedo a quedarse sin tinta o papel, Suite francesa es un emblema de crisis.

No era el primer exilio de Irène: nacida en Kiev en 1903 e hija de un poderoso banquero ruso, hubo de dejar Moscú tras la Revolución; vivió el París de entreguerras con pasión adolescente. De confesión judía, aprendió ruso, francés, yiddish, polaco, finés, inglés y vasco. Sufrió el desarraigo de país, padres y lengua natal. Quizá fuera la ausencia de una madre distante y cruel lo que marcó la mirada de Irène: en su infancia habitó en Ucrania, Biarritz, San Juan de Luz, Crimea, San Petersburgo… Territorios que dejaron tan profunda huella como la lectura de Turgueniev, Gogol o Dostoievsky. Menos huella le dejó su madre: alojada en caros hoteles, manda a la nodriza y a la pequeña Irène a pensiones baratas. La distancia es la lente con que Irène mira el mundo: nada es lo que parece si lo miras bien. «¡Eso que vosotros llamáis éxito, victoria, amor u odio, yo lo llamo dinero!», escribe en una de sus primeras novelas.

viernes, 15 de noviembre de 2019

Charles Dickens: Nuestro amigo común. Por Jorge Sanz Barajas

Dickens, Charles: Nuestro amigo común. Mondadori, Barcelona, 2010. 1.184 páginas. Introducción de Adrian Poole. Traducción de Damián Alou Ramis. Comentario realizado por Jorge Sanz Barajas.

Nuestro amigo común es la novela ignorada de Dickens. Cualquier lector o lectora reconoce dentro de su historia emocional títulos como David Copperfield, Oliver Twist o Cuento de Navidad, pero difícilmente incluiría en ese rango otras como Casa desolada, Tiempos difíciles o Grandes esperanzas. Es probable que ni siquiera sepa de la existencia de Nuestro amigo común, a mi juicio la más sólida de las producciones de Dickens.

Fue la última novela que Dickens consiguió terminar, y lo hizo al borde de la extenuación. Es, probablemente, la más perfecta de todas las que surgieron de su cálamo. Henry James, tan crítico con toda su obra, reconoce en Nuestro amigo común una mano experta en el arte de manejar argumentos y personajes que le había negado en la mayoría de sus obras anteriores. A juicio de Italo Calvino, estamos ante una de las mejores novelas del siglo XIX, una absoluta obra maestra de invención y técnica: «Los inicios de las novelas de Dickens suelen ser memorables –dice Calvino–, pero ninguno supera el principio de Our Common Friend, penúltima novela que escribió, última que terminó. Llevados por la barca del pescador de cadáveres, nos parece entrar en el reverso del mundo».

miércoles, 30 de octubre de 2019

Don DeLillo: Punto Omega. Por Jorge Sanz Barajas

DeLillo, Don: Punto Omega. Seix Barral, Barcelona, 2010. 160 páginas. Traducción de Ramón Buenaventura. Comentario realizado por Jorge Sanz Barajas.


«Cuando yo uso una palabra —insistió Humpty Dumpty con un tono de voz más bien desdeñoso— quiere decir lo que yo quiero que diga…, ni más ni menos. 
—La cuestión —insistió Alicia— es si se puede hacer que las palabras 
signifiquen tantas cosas diferentes. 
—La cuestión —zanjó Humpty Dumpty— es saber quién es el que manda…, 
eso es todo». 
(Lewis Carroll, Alicia a través del espejo)

Quien nunca haya leído a Don DeLillo, tendría difícil saber por dónde empezar, aunque una buena opción sería Punto Omega. Don DeLillo es uno de esos escritores de raza que siempre caminan un paso por delante de la realidad. El arte de Don DeLillo es el de decir lo indecible, el de darle verbo a emociones que difícilmente pudieran tenerla en otra mente que no fuera la suya.

Repasando su obra, uno puede encontrarse pequeñas maravillas como Body Art –Lauren, viuda del director de cine Rey Robles vuelve a su casa tras el suicidio de su marido; allí se encuentra con el señor Tuttle, un ser carente de lenguaje con el que es imposible comunicar de manera verbal; con él, un ser extraño que vive en el piso

viernes, 18 de octubre de 2019

Justo Navarro: El espía. Por Jorge Sanz Barajas

Navarro, Justo: El espía. Barcelona, Anagrama, 2011. 213 páginas. Comentario realizado por Jorge Sanz Barajas.

La novela, la biografía, la ficción, las posibilidades que la imaginación reporta a la historia, son cuestiones en boga en estos momentos en el gremio de los historiadores. Tuñón de Lara decía que no se podía entender el siglo XIX sin leer a Galdós o el XX sin conocer la obra de Max Aub. No es descabellado pensar que cualquier investigador sobre Ezra Pound debe leer El espía, de Justo Navarro.

¿Realidad o ficción? Quizá no sean tan antitéticas como pensábamos. El mundo de lo posible siempre ha tentado a la historia. En el libro de cuentos La trama celeste, Bioy Casares especula con la historia que pudo ser. Imagina en uno de los cuentos un mundo en el que no existe el país de Gales: las calles de Buenos Aires se llaman Márquez en lugar de Bynnon, no hay quien encuentre el pasaje Owen. El capitán de ascendencia galesa Ireneo Morris, que desaparece con su aeroplano y al que nadie reconoce como tal cuando vuelve de nuevo a su tierra, tampoco existe en realidad. ¿Está sugiriendo Bioy Casares que la realidad es multidimensional y simultánea? En todo caso, la narración consigue esa magia con la destreza de la imaginación asociada a la pluma.

La historia que Justo Navarro nos propone es en esta ocasión la del eximio poeta y extravagante ciudadano Ezra Pound, amigo de Duchamp, T. S. Elliot, Tzara, Léger, Joyce, W. B. Yeats o Hugh Selwyn Mauberly. Tradujo del italiano, el chino y el japonés. Escribió los ciclópeos Cantos, obra cumbre de la poética del siglo XX; fue feroz antisemita y admiró en sus odios compartidos a Mussolini. Murió el Día de todos los Santos en Venecia, aunque en realidad dicen que falleció en Medinaceli, ciudad que visitara en 1910 siguiendo la estela del Cid, pues cuando descubrieron en su homenaje un busto, al descorrer la cortinilla dejando ver la piedra bajo un olmo, un mirlo comenzó a cantar. «A Ezra Pound. Aún cantan los gallos al amanecer en Medinaceli», reza la placa.

viernes, 25 de mayo de 2018

Natalia Ginzburg: Todos nuestros ayeres. Por Jorge Sanz Barajas

Ginzburg, Natalia: Todos nuestros ayeres. Lumen, Barcelona, 2016. 353 páginas. Traducción de Carmen Gaite. Prólogo de Elena Medel. Comentario realizado por Jorge Sanz Barajas (Profesor de Literatura Española, Colegio “El Salvador” de Zaragoza. E-mail: jsanz@jesuitaszaragoza.es).

La épica de la vida cotidiana

Celebramos en 2016 el centenario de Natalia Ginzburg. Presagiábamos un repunte editorial importante, pero en ningún caso que el esfuerzo de la editorial Lumen por reeeditar varios de los mejores libros de la escritora italiana vivieran varias reediciones en este 2017. Natalia Ginzburg es una de las imprescindibles. Si usted quiere tirar del hilo del que pende buena parte de la mejor literatura actual, ese cabo tendrá sus iniciales. Hoy le recomendamos quizá su mejor novela, Todos nuestros ayeres, una espléndida narración sobre la segunda guerra mundial pero sin la guerra, un estudio sobre todo aquello que palpita antes del dolor extremo, sobre todo aquello que se presiente, sobre el miedo. 

Podríamos haber reseñado cualquiera de sus libros porque son excepcionales, pero hemos escogido esta novela porque la vida de la autora corre pareja a la de Anna, la protagonista, y sin embargo tiene la cautela de marcar una distancia suficiente para que el relato tiña de emoción la lectura sin enturbiar la prosa de exceso, retórica o afecto. La prosa de Ginzburg tiene la virtud de actuar como detergente natural contra el exceso de grasa narrativa; es a la prosa lo que

martes, 13 de marzo de 2018

Hassan Blasim: El loco de la plaza Libertad. Por Jorge Sanz Barajas

Blasim, Hassan: El loco de la plaza Libertad. Galaxia Gutenberg, Madrid, 2016. 110 páginas. Traducción de Amelia Pérez de Villar. Comentario realizado por Jorge Sanz Barajas.

La literatura en árabe sigue siendo la gran desconocida en España. Tenemos ya excelentes traductores, pero el mercado editorial español sigue siendo refractario a esta lengua. Si las traducciones ocupan el 21% del mercado editorial, las del árabe alcanzan apenas el 0,1%. Es un dato bastante pobre para un país que tiene casi dos millones de árabes, no tanto porque se desprecie un segmento lector sino porque a los lectores españoles no nos facilita la comprensión de su mundo. El dato no significa exactamente que desconozcamos por completo la literatura árabe; conocemos bien a aquellos autores/as que escriben en francés o inglés, el caso de los argelinos Assia Djebar o Yasmina Kadra, el franco-libanés Amin Maalouf o el del marroquí Tahar Ben Jelloun. Respecto a quienes escriben en árabe, han tenido mejor suerte el egipcio Naghib Mahfuz, nobel en 1988, el palestino Gassan Kanafani o el poeta sirio-libanés Adonis (Alí Ahmed Said). Es cierto que tenemos traducido Al este del mediterráneo, del jordano Abderraman Munif, pero desconocemos la producción de autores clásicos del siglo XX tan importantes como el galileo Mahmud Darwish, el palestino Sargon Boulus, el saudí Mohamen Al-Harbi, el sirio Nizar Kabani o el libanés Khalil Hawi. Hay que acudir al francés o al inglés para encontrar estas joyas literarias. Es imperdonable que no dispongamos ya de traducciones de extraordinarios clásicos del siglo XX como Buscando a Walid Masoud, del palestino Jabra Ibrahim Jabra; Las pesadillas de Beirut, de la escritora de origen sirio Ghada al-Samman; Guerra en Egipto, de Yousef al-Qaeed; Rama y el dragón, de Edward al-Kharrat; Así habló Abu Huraira, del tunecino Mahmoud Messadi; Laila y el lobo, de la iraquí Alia Mamdouh o El tiempo desolado, del sirio Haidar Haidar. En resumen, conocemos bien a los autores árabes que escriben en francés o inglés pero ignoramos buena parte de la producción literaria del siglo XX en lengua árabe.

miércoles, 3 de enero de 2018

Ricardo Menéndez Salmón: El Sistema. Por Jorge Sanz Barajas

Menéndez Salmón, Ricardo: El Sistema. Seix Barral, Barcelona, 2016. 328 páginas. Comentario realizado por Jorge Sanz Barajas (Profesor de Literatura Española. Colegio “El Salvador”, Zaragoza. E-mail: jsanz@jesuitaszaragoza.es).

El Sistema, última novela de Ricardo Menéndez Salmón, inquieta de la primera a la última línea. Si es cierto que la realidad supera a la ficción y que las metáforas tienen una inexplicable tendencia a desplazar el elemento irreal a la realidad y viceversa, esta novela es un acta de defunción: la de la sociedad de la información o la del capitalismo avanzado o como prefiramos llamarlo.

El lector hallará una prosa precisa y bella, cincelada al milímetro como si cada frase fuera la última que ha de escribirse. Pocos autores como Menéndez Salmón para atrapar una nota musical y convertirla en palabra, dar cuerda al reloj de las sensaciones internas u horadar el alma compleja de las emociones. Todo, absolutamente todo, queda removido. Esto es lo mejor de las novelas de Salmón: una vez cierras el libro, esas mociones interiores siguen latiendo. Lo peor: tardan en apagarse. No es fácil leer a Salmón, ya que su claridad mueve al complejo territorio del espanto.

La novela aborda la forma en que el “Sistema” se ha ido forjando y la manera en que se desintegra. El “narrador”, un lingüista formado en la “Boca” del sistema, habita en la frontera, frente al mar. Del “Sistema” sabe que se ha ido

martes, 24 de octubre de 2017

Gustavo Martín Garzo: No hay amor en la muerte. Por Jorge Sanz Barajas

Martín Garzo, Gustavo: No hay amor en la muerte. Destino, Barcelona, 2017. 204 páginas. Comentario realizado por Jorge Sanz Barajas (Profesor de Literatura Española, Colegio El Salvador, Zaragoza; e-mail: jsanz@jesuitaszaragoza.es).

El amor fronterizo de Dios: Martín Garzo novela a Abraham e Isaac 

Gustavo Martín Garzo es uno de esos escritores cuya narrativa gana seguidores conforme avanza el tiempo. Tiene el don de la intemporalidad; sus relatos carecen de fecha de caducidad porque tienen la virtud de enhebrarse en esas emociones que resurgen sin importar la coyuntura que los ampara: las relaciones entre padres e hijos, entre el amor y el deber, entre la letra y el espíritu, entre las obras y las palabras… 

Garzo siente especial predilección por personajes que escuchan sus propias voces, que miran tanto hacia dentro cono hacia fuera, que se contemplan como herederos de la creación. Grandes novelas como El lenguaje de las fuentes (1994), no han dejado de ganar adeptos entre lectores y críticos: en ella, José, que ha recibido el regalo del matrimonio con María, vive atormentado por el amor tardío, la distancia de su amor, los ángeles que rondan sus vidas, los silencios y las voces que interpretan ese extraño mundo en el que se gesta el hijo de Dios. María aparece en este relato como una joven adolescente manca de la mano derecha, una forma de humanizarla, de desacralizarla, de embellecerla desde su carencia; era, tal cual ha explicado alguna vez, como si alguien arrojara una piedra contra una hermosa vidriera a fin de revertirla al cristal que fue en su origen; devolverle su humanidad significaba rescatar el eterno femenino y abajarlo a su condición de mujer concreta, humilde y asombrada. José quedaba así a expensas de los celos, la incertidumbre y el dolor, un sacrificio para el que no fue convocado, una lección sobrevenida de humildad. Dieciocho años después, publica la bellísima Y que se duerma el mar (2012), fábula sobre la Virgen niña cuyo título toma de un verso de Simónides de Ceos; en esta novela incorpora ya algunas de las estrategias narrativas que explota en No hay amor en la muerte: la habilidad sugestiva de los narradores orales como la misteriosa Abigail, que se hará eco de los primeros años de María en Emaús, los relatos de los mercaderes Leví y Yehuda o las bellas historias de Diótimo y Jafira en Alejandría, pueblan la historia de ángeles zoomórficos o antropomórficos que invitan a soñar, como el incierto pero único camino capaz de llevarnos al conocimiento primario.