Sara Lumbreras Sancho: Respuestas al transhumanismo. Por Lluís Oviedo Torro

Lumbreras Sancho, Sara: Respuestas al transhumanismo. Cuerpo, autenticidad y sentido. Digital Reasons, Madrid, 2020. 196 páginas. Comentario realizado por Lluis Oviedo Torro (Pontificia Universidad Antonianum, Roma).

El tremendo progreso que conoce la humanidad en las últimas décadas en varios campos puede justificar un sentido de satisfacción ante los logros alcanzados y sus beneficios para la mayoría. Sin embargo, muchas voces invitan a observar dichos avances de una forma más atenta y matizada, sobre todo teniendo en cuenta las ambigüedades que se perciben y los riesgos que se asocian a dicho progreso. La cuestión se plantea de forma más crítica a causa de la profusión de visiones de futuro que se ofrecen a partir de una proyección de los logros actuales y de los niveles de desarrollo científico y técnico alcanzados, que podrían anticipar escenarios hasta hace poco impensables en vistas de una mejora humana en todos los campos.

Los problemas apenas señalados hacen urgente y necesario obras de análisis y discernimiento crítico de la situación actual y de los posibles horizontes que van delineándose en los próximos años. En ese sentido el nuevo libro de Sara Lumbreras significa una aportación muy oportuna, detallada, al tiempo que profunda, para la mejor comprensión y el discernimiento de las propuestas que apuntan a una amplia optimización de los recursos técnicos. Dicha visión declara abiertamente la superación de todos los grandes problemas que sufre la humanidad, dando lugar a lo que la autora denomina ‘tecnooptimismo’.

El libro cubre de forma equilibrada tanto la parte descriptiva, que ofrece un recorrido bastante exhaustivo a través de las múltiples promesas de mejora, que se reflejan en muchos libros de gran éxito editorial; así como la parte crítica, que no ofrece solo un ajuste de cuentas con los evidentes límites que plantean las utopías descritas, sino que ofrece reflexiones sobre la mente, el cuerpo y el sentido de la vida humana para construir un verdadero ensayo de antropología actualizada con las mejores aportaciones científicas, sin abandonar una profunda sensibilidad humanista.

El libro se compone de cinco partes. La primera, bajo el título “El desafío del transhumanismo”, recorre los escenarios en los que dicho programa plantea su gran visión del futuro. Introduce una breve historia del movimiento, para ambientarlo dentro de lo que denomina ‘tecnooptimismo’, como una tendencia general más amplia, o un ambiente cultural propio de la modernidad tardía. En ese contexto se vuelve un objetivo plausible el fin del trabajo, se divisa una era de la abundancia, y se abren paso los sistemas superinteligentes, capaces de resolver todo tipo de problemas. El desarrollo de la Inteligencia Artificial (IA) supone un gran avance y encierra grandes promesas, pero también retos de gran alcance, como el problema del control de esos sistemas que impida su perversión y abusos. El tema de la ‘singularidad’ propuesto por Kurzweil, merece atención especial, por su carácter de esperanza secular técnica con toda la carga de plenitud que encierra, y que apunta incluso a una divinización de los humanos, algo explícitamente sugerido por Harari.

La segunda parte se consagra al análisis de las propuestas de mejoramiento humano, y que comprenden tanto la dimensión física, como la intelectual e incluso la moral. Lumbreras recorre los distintos ambientes y desarrollos que conoce ya en nuestros días dicho programa, desde los planes para optimizar la salud hasta los que buscan alargar la vida. Son conocidos los programas de mejora física o corporal, pero también cognitiva, mientras se ensaya más tímidamente en el campo moral. Merecen una atención especial los ensayos en el campo de la edición genética y de la asistencia reproductiva, como una de las claves que hacen más factible dicha mejora, así como los intentos de conectar el cerebro humano a dispositivos electrónicos que permitan incrementar indefinidamente sus prestaciones.

La tercera parte se titula “El cuerpo” y ya forma parte de la propuesta antropológica de Lumbreras, que se inscribe claramente en la tradición de un humanismo encarnado o ‘incorporado’, en el que el cuerpo juega un papel esencial, algo que muchas versiones del transhumanismo descuidan, a causa de su reduccionismo. Merece especial interés la presentación de una línea de ‘espiritualidad encarnada’ y de apertura a la trascendencia que se reivindica en contraste con los desarrollos analizados en la parte anterior, una perspectiva que se nutre también de tradiciones religiosas orientales, atentas a la corporeidad y la capacidad espiritual ligada a formas ‘especiales’ de conciencia. Dichas experiencias revelan una riqueza que se revierte en el propio nivel corporal, e inciden en una visión más holística de la persona, en la que es imposible separar la dimensión corporal y la espiritual.

La cuarta parte se titula “Autenticidad” y profundiza en algunos temas centrales del debate antropológico contemporáneo, como el carácter más o menos exclusivo de nuestra condición, en relación a otros animales y a las máquinas inteligentes. El análisis propuesto conduce a formular una tendencia: cuanto más se extiende la idea de humanidad, más se reduce la de especificidad, que al final se percibe como una cuestión de grado, no de sustancia. No obstante, con los robots las cosas son más complejas e invitan a tener cautela, lo que apunta a un criterio de ‘emergencia’ a la hora de discernir hasta qué punto las máquinas inteligentes podrían dar origen a verdadera conciencia: esto sucedería si no fuera resultado de entrenamiento, sino algo espontáneo.

En la quinta parte, la cuestión del sentido cierra los análisis de la reflexión más antropológica del libro, y se propone desde una perspectiva de los ‘recursos’ y de su uso. Se denuncia el riesgo de mercantilización y la necesidad de contrastarla desde una perspectiva distinta, en la que se reivindican los valores ligados al cuerpo, la experiencia y las relaciones. Todo ello desemboca en una visión matizada de la tecnología dentro de una perspectiva que conecta con los significados más importantes para la realización personal.

El análisis de Lumbreras permite cotejar dos propuestas o tendencias en contraste: la que deriva del tecnooptimismo, con sus utopías y horizontes de superación de los límites actuales; y la que deriva de una antropología más holística, encarnada y al mismo tiempo espiritual y abierta a la trascendencia. La autora nos emplaza ante una cierta decisión, en torno a la bondad o conveniencia de cada una de las dos líneas. Este es un libro que da que pensar y que invita a tener en cuenta las distintas opciones o caminos que se abren a la humanidad con los desarrollos técnicos de última generación, y al mismo tiempo propone un programa alternativo que evite los grandes peligros que se perciben en una actitud reductiva y demasiado confiada en los logros de las nuevas tecnologías.